(Agraria.pe) La comercialización de mandarina en 2020 tuvo un buen desempeño a nivel mundial. Se comercializaron US$ 5,500 millones, con un incremento de 15% respecto a 2019, en las tres grandes categorías de la fruta: tangerinas y satsumas (45.40% de participación), clementinas (33.40%) e híbridas (21.10%).
En el caso de las tangerinas y satsumas, fueron principalmente importadas por Rusia (US$ 432 millones por 643.000 toneladas) y Estados Unidos (US$ 419 millones por 252.000 toneladas). En el primer caso, se registró un incremento de 2% en valor y 17% en volumen, mientras que en el segundo mejoró 45% en valor y 41% en volumen con respecto a 2019.
Las clementinas, por su parte, fueron adquiridas principalmente por Alemania (US$ 309 millones por 255.000 toneladas) y Francia (US$ 297 millones por 218.000 toneladas). En el país germano se tuvo un crecimiento de 18% en valor y 7% en volumen, mientras que en el galo se elevó 15% en valor pero se mantuvo constante el volumen en comparación al año anterior.
Y en cuanto a las variedades híbridas tuvieron mayor popularidad en Rusia, los Países Bajos y los Estados Unidos. En Rusia, las importaciones alcanzaron los US$ 107 millones por 143.000 toneladas con un incremento de 13% en valor y 11% en volumen frente a 2019. En el mercado neerlandés, las importaciones sumaron US$ 110 millones por 79.000 toneladas, con un incremento de 75% en valor y 56% en volumen. En Estados Unidos, las importaciones de mandarinas híbridas sumaron US$ 87 millones por 55.000 toneladas, con un crecimiento de 62% en valor y 55% en volumen.
Líderes en las variedades híbridas
El Perú se consolidó como el sexto proveedor de mandarinas en el mundo, con 5% de participación, un punto porcentual más que en 2019. Por detrás de España, China, Marruecos, Turquía y Sudáfrica, países que tienen una participación conjunta de 70%. Se espera que este año las exportaciones de mandarina peruana sigan creciendo, impulsadas por una mayor demanda de cítricos y productos que se cree ayudan a combatir las afecciones respiratorias, como el nuevo coronavirus. El valor alcanzado dependerá de la disponibilidad de la fruta con calidad de exportación que haya en el año.
En 2020, se destinó el 37% de la producción de mandarina a la exportación, mientras que en años anteriores solo se destinaba el 30%. Este año se esperaría que las empresas dispongan entre 40% y 45% de la producción. En caso se destine 40% de la producción a la exportación, se alcanzaría las 209 mil toneladas por US$ 264 millones, 11% más en volumen y 12% más en valor con respecto a 2019. En caso las empresas logren disponer 45% de la producción a la exportación, se elevarían los envíos a 235 mil toneladas por US$ 294 millones, 25% más en volumen y 26% más en valor.
Si bien el Perú se ubicó como uno de los mayores exportadores de mandarinas en el mundo, tiene un largo camino por recorrer, pues se encuentra fuertemente rezagado frente a sus competidores en las principales variedades. El país ocupó el puesto número 13 en las exportaciones de tangerina y satsuma en 2020 (US$ 45 millones), y el puesto 12 en clementina (US$ 12 millones). Por su lado, países como China (más de US$ 950 millones), Turquía (US$ 390 millones) y Sudáfrica (US$ 372 millones) ocuparon los primeros puestos en exportaciones de tangerinas y satsumas, mientras que España fue el principal exportador de clementinas, con US$ 899 millones.
Sin embargo, el Perú se posicionó como el segundo proveedor de mandarinas híbridas en el mundo (US$ 194 millones). Las mandarinas híbridas españolas fueron las que ocuparon el primer puesto con una gran diferencia en cuanto al valor exportado (US$ 424 millones).
Cabe mencionar que las variedades híbridas son las que más han crecido en los últimos tres años: 78%, hasta alcanzar los US$ 1.160.5 millones exportados en 2020. Gracias a su buena acogida, incrementaron en cinco puntos porcentuales su participación dentro de las mandarinas, pasando de 16% de participación en 2017 a tener 21% en 2020.
Por otra parte, las variedades que perdieron participación en el mercado mundial fueron las satsumas y las tangerinas, que pasaron de representar 49% en 2017 a tener 45% en 2020 (cuatro puntos porcentuales menos). Esto se dio a pesar de que las exportaciones de las variedades crecieron 21% en los últimos tres años, hasta sumar US$ 2.505 millones. En cuanto a las clementinas, las exportaciones de estas variedades crecieron 25%, hasta alcanzar los US$ 1.842 millones. Esta variedad redujo su participación en dos puntos porcentuales, pasando de representar 35% de las exportaciones totales del cítrico en 2017, a representar 33% en 2020.
Mejora desempeño peruano
Los envíos mundiales de mandarina peruana aumentaron en valor en el transcurso de 2020 en comparación al periodo anterior. Ello se vio mejor evidenciado en los meses picos de campaña. Para la tangerina y satsuma peruana, los meses más representativos fueron abril, mayo y junio, los cuales acumularon el 82% del total exportado. Durante estos meses se registró un aumento de valor de 35%, 27% y 45%, respectivamente, en comparación a los mismos de 2019. En mayo y junio, donde se acumuló el 92% del total, los envíos de mandarina clementina peruana aumentaron 18% y 75% en valor. Con respecto a las mandarinas híbridas peruanas, fueron los meses de junio, julio y agosto donde se exportó el mayor valor, concentrando el 86% del total. Dichos meses presenciaron un aumento en valor de 33%, 32% y 49%, correspondientemente.
Los envíos se encontraron relativamente concentrados en un solo destino, el cual fue Estados Unidos. Este mercado acumuló el 89% de las exportaciones de clementina peruana (US$ 10 millones), 52% de las híbridas (US$ 101 millones) y 32% de la tangerina y satsuma (US$ 14 millones). Detrás se ubicaron el Reino Unido (US$ 11 millones) y Canadá (US$ 7 millones) para tangerinas y satsumas, mientras que los Países Bajos (US$ 20 millones) y Reino Unido (US$ 18 millones) para las híbridas.
En Estados Unidos, la clementina peruana fue comercializada a US$ 1.65 por kilogramo. Este precio fue el segundo más alto, superado por la clementina chilena, que cotizó a US$ 1.73. Chile fue el mayor proveedor, acumulando el 61% de participación (US$ 90 millones), mientras que el Perú estuvo en el cuarto lugar, con 6% de participación (US$ 9 millones). Por su parte, Marruecos (US$ 29 millones) y Sudáfrica (US$ 16 millones) obtuvieron el segundo y tercer lugar dentro de los proveedores de clementina a Estados Unidos.
La tangerina y satsuma peruana se cotizaron en promedio a US$ 1.67 por kilogramo en Estados Unidos, por debajo de lo que obtuvieron las de Chile (US$ 1.78) y Uruguay (US$ 1.68). Cabe resaltar que Chile (US$ 147 millones) y el Perú (US$ 146 millones) ocuparon los primeros puestos dentro de las importaciones de los Estados Unidos, con una participación de 35% cada uno.
En el caso de las variedades híbridas, el producto peruano fue mejor pagado en el mercado estadounidense (US$ 1.49 por kilogramo) que en el neerlandés (US$ 1.42 por kilogramo) y británico (US$ 1.01 el kilogramo). En Estados Unidos, el Perú ocupó el segundo puesto (US$ 17 millones), mientras que Chile ocupó el primero (US$ 65 millones). Asimismo, también obtuvo el segundo lugar en los Países Bajos (US$ 17 millones), siendo sobrepasado por Sudáfrica (US$ 45 millones). En Reino Unido, las mandarinas híbridas españolas fueron las que concentraron la mayor participación (90%), con un valor de importación de US$ 35 millones.
Fuente: Fresh Fruit
