Por: Liliana Aragón, decana de la Facultad de Agronomía de la Universidad Nacional Agraria La Molina
Considerando la actual coyuntura del país, este documento tiene como objetivo analizar si las propuestas de los principales candidatos a la Presidencia de la República definen adecuadamente las políticas agrarias que van a regir en los próximos años. En esa línea este portal publicó las propuestas de los siguientes grupos políticos: Fuerza Popular (Candidata a la presidencia: Keiko Fujimori), Todos por el Perú (Julio Guzmán), Alianza para el Progreso del Perú (César Acuña), Peruanos por el Kambio (Pedro Pablo Kucynski) .
El reto del próximo Presidente del Perú será establecer políticas que coadyuven a la reducción de la pobreza, sobre todo en el área rural y promover su desarrollo bajo el esquema de la nueva ruralidad, en donde la agricultura es una de las principales actividades del sector rural en el Perú.
Si bien es cierto la pobreza en el área rural se ha reducido en el orden del 2% del 2013 al 2014 (Fuente: INEI, 2015), sigue habiendo porcentajes representativos (46%) de ésta. En el 2014, a nivel de regiones naturales, la pobreza afectó al 33,8% de la población de la sierra, principalmente a la del área rural (50,4%); al 30,4% de la selva (selva rural 41,5%) y al 14,3% de la costa (costa rural 29,2%). En las tres regiones, la pobreza en el área rural es mayor que en la zona urbana, y es en el área rural en donde se realiza la agricultura.
Otro reto fundamental es fomentar el desarrollo rural según los distintos tipos de agricultura en un contexto de cambio climático que exige establecer una producción sustentable con respeto al ambiente. Además, se debe proporcionar los requerimientos alimenticios a la población, en un país megadiverso, cuya riqueza de bosques y biodiversidad preocupa al mundo en general.
Los planes de gobierno analizados plantean en general propuestas referidas a la titulación de tierras, requerimientos de semillas mejoradas y manejo del agua principalmente. La propuesta de PPK, por ejemplo, concatena el rol de la agricultura con la reducción de la pobreza en el sector rural y se plantea como una de las mejores alternativas para superar los porcentajes de pobreza.
En cambio, las propuestas dirigidas a promover el desarrollo de la nueva ruralidad son muy tibias; en forma inherente lo mencionan las propuestas de PPK y Todos por el Perú. La propuesta de Todos por el Perú interrelaciona las actividades vinculadas al agro con las de otros sectores, demostrando que debe haber una coordinación entre varios estamentos.
Los candidatos y sus respectivos grupos han cumplido al presentar un plan de gobierno. No es explícito sin embargo el planteamiento de políticas de gobierno o políticas de Estado que deberían regir por los quinquenios siguientes y hacia los cuales los siguientes planes de gobierno deberían alinearse, es decir, pensar en el futuro a largo plazo.
En los últimos años, las políticas han favorecido principalmente la agroexportación y la agricultura de la costa. La Constitución de 1993 eliminó el rol de Estado de velar por la integridad de las tierras de las comunidades andinas y amazónicas, y en ninguna de las propuestas revisadas se pone atención a este contexto en el cual se desarrollan los distintos tipos de agricultura (la propuesta de Fuerza Popular solo las menciona); sobre todo en el que abarca el mayor porcentaje de pequeños agricultores o agricultores de subsistencia de zonas altoandinas. Hay que recordar que estas zonas se caracterizan por su extrema pobreza y desprotección frente a la posible pérdida de sus tierras comunales y abusos de la minería informal, así como a malos dirigentes comunales, lo que trae como resultado conflictos sociales que no permiten el desarrollo rural y la reducción de la pobreza. (Eguren, 2006).
Una debilidad que se observa en los planes de gobierno, es que al no haber una política, todas las propuestas para el agro generalmente son de tipo mediático o cortoplacista (solo para el período de 5 años de gobierno en turno); por lo que no hay un avance o progreso en el sector. La experiencia de la PAC (Política Agraria Comunitaria) en la Comunidad Europea ilustra que alcanzar la meta requiere más de un periodo de gobierno y que esta debe ir variando o modificándose en función al contexto y los resultados que se van obteniendo (Atance y Tió, 2000).
[1] La columna fue escrita antes de la publicación
en este portal del último informe sobre planes de gobierno para el sector
agrario, que fue dedicado a Alianza Popular.