Se dice que un proyecto es AFPable cuando es susceptible de ser financiado por los fondos de pensiones que administran las AFPs. En ese sentido nuestro agro tuvo altas expectativas porque algunas colocaciones de las AFPs se destinen a promover inversiones de largo plazo como las forestales o desarrollen una oferta efectiva de financiamiento y capital para las pequeñas y medianas empresas. Sin embargo, de poco o nada nos han servido estos fondos para capitalizar al sector.
Siempre defendí al sistema de las AFPs porque le permitía al país desarrollar un mercado de capitales para impulsar sus diversos sectores. A la fecha se han acumulado cerca de S/ 110 mil millones (aprox. 18% del PBI) en ahorro previsional de los trabajadores y ya tenemos un stock importante de capital para abastecer a nuestra aún pequeña economía. Entonces ya se le puede tomar el examen al sistema pensionario peruano.
El examen más interesante lo ha hecho Juan Mendoza y un equipo de investigadores de la Universidad del Pacifico. Mendoza es un economista que le ha dado un nuevo aire al pensamiento económico del país y ha roto el molde del perfil del economista de dicho centro de estudios. Abundan los profesionales que parecen haber sido formados en serie, en una línea de ensamblaje.
El equipo, que Juan Mendoza integra, ha llegado a la conclusión de que podemos prescindir de la aportación obligatoria a las AFPs y hacer del aporte una decisión voluntaria para que de esta forma surja la verdadera competencia entre las Administradoras de Fondos de Pensiones.
Los investigadores también plantean una jubilación solidaria de 200 soles para todos aquellos compatriotas que no tendrán acceso a una pensión llegado a sus 65 años. Esta medida beneficiará directamente a la mayor parte del sector rural en el Perú. La propuesta también incluye desaparecer la ONP y pensión 65. Aunque en realidad se conseguirá potenciar y masificar esta última.
De todo el debate surgido a partir de la investigación de Mendoza y equipo, me quedo con su propuesta y considero que llegó el momento de liberalizar este mercado y no darle un negocio cautivo a las AFPs. El Estado puede y debe considerar esta opción seriamente y además complementarla. ¿Cómo? estableciendo un incentivo: Todo aquel trabajador que decida voluntariamente ahorrar para su Fondo de Pensiones podrá descontar, del impuesto a la renta que paga, el seguro de invalidez y fallecimiento.
Juan Mendoza y equipo nos traen una buena noticia al Perú, no solo por su iniciativa sobre las AFPs sino porque renuevan la confianza en los profesionales de la economía. Su propuesta ayudará a formalizar al país y promover el empleo. Claro está que se necesitan medidas complementarias como extender el régimen laboral de la Ley de Promoción Agraria a todos los sectores (solo para los nuevos empleados).
El régimen laboral agrario también se verá potenciado eliminando la obligatoriedad de los aportes a la AFP.
27 de Octubre del 2014