(Agraria.pe) Los mercados de abasto o de barrio son locales cerrados compuestos por puestos de venta individuales de mayoristas y minoristas, y que se dedican al acopio y venta de productos alimenticios y otros tradicionales no alimenticios. Constituyen la principal forma de abastecimiento de alimentos, bienes y servicios de la población a nivel nacional.
En el Perú existen 2612 mercados de abasto, de los cuales 44 son mayoristas y 2568 minoristas. 1232 se encuentran en Lima. Es un canal importante para la economía nacional porque provee empleos a más de 9000 personas. Además, el 75% de los peruanos realizan sus compras en este tipo de locales (INEI, 2017).
Según un informe de Kantar (2021), aunque durante la pandemia hubo una caída en la frecuencia de visitas a los mercados, los hogares han incrementado en un 18% los gastos por cada acto de compra de productos de consumo masivo. Dentro del mercado de abastos se observa que, entre todas las canastas, la categoría de bebidas que incluye café y otros ha sido la que más ha crecido debido a su vínculo con la indulgencia.
Hoy en día los aspectos más importantes para elegir el canal de compra de estos productos son la cercanía al hogar y el surtido. Además, debido a que aún se teme al contagio por Covid-19, el comprador que perciba estas características en un punto de venta se inclinará más por comprar en éste mismo lugar. Kantar afirma que la pandemia ha inaugurado la “era de la lealtad al punto de venta”.
Los mercados de abasto se han convertido en el canal más importante, 42% del crecimiento del gasto en el último año provino de este canal. Los hogares de estratos medios en el país han sido los que más trasladaron su consumo aquí.
El consumidor valora de manera diferente los atributos de cada canal. A continuación, se muestra en orden de mayor a menor las características preferidas según el tipo de punto de venta.
Por lo anteriormente expuesto, el mercado de abasto resulta un canal atractivo para los jugadores en la categoría de café ya que gran parte de los consumidores peruanos realizan sus compras para consumo doméstico en estos locales. Existe una ventana comercial para los fabricantes de marcas locales y regionales de café.
Quiénes compran en un mercado de abasto valoran la variedad de productos a precio cómodo, así como también la experiencia de conversar con el “casero” (el vendedor o dueño del puesto de venta). Hay indicios de que su vínculo con el punto de venta y la producción local se ha fortalecido durante la pandemia.
No cabe duda que los mercados de abasto son un punto de venta acogedor para el consumidor local: proveen un espacio interesante y aún poco explorado para promover el consumo de café, y es también rico en información que puede estudiarse para identificar los motivadores de compra de los consumidores potenciales en el mercado nacional.