(Agraria.pe) El último viernes se desarrolló el foro “El agro peruano hacia el 2026”, donde el presidente de la consultora Inform@cción, Fernando Cillóniz Benavides, presentó ocho ejes a trabajar para el desarrollo del sector (agua; carreteras y conectividad; tecnología; financiamiento; información; diversificación; competencia extranjera; y eficiencia estatal).
En el evento estuvieron como panelistas el presidente de Conveagro, Clímaco Cárdenas; el director ejecutivo de AGAP, Gabriel Amaro; así como el decano de la Facultad de Agronomía de la UNALM, Andrés Casas; y el decano de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNSCH, Rolando Bautista Gómez, quienes destacaron las propuestas del expositor y mostraron su visión para el sector.
No hay política pública para la agricultura familiar
El presidente de la Convención Nacional del Agro Peruano (Conveagro), Clímaco Cárdenas, señaló que hasta el día de hoy el Estado no cuenta con una política pública en beneficio de la agricultura familiar, que comprende a 2.2 millones de agricultores que representan el 98% de las unidades agropecuarias en el país.
“Se debe reconocer que el propio Estado, y las políticas que se implementan en Perú, no reconocen como prioritario al sector, una muestra de ello es que el 11.3% del PBI es aportado por el sector agricultura (según el Banco Mundial) sin embargo el gobierno solo le asigna el 0.7% del presupuesto”, comentó.
Agregó que la agricultura es el sector que genera mayores puestos de trabajo en Perú (de 4 puestos de trabajo 1 lo genera la agricultura) además, son más de 8 millones de personas que dependen de esta actividad para generar recursos y utilidades a sus economías familiares en los espacios rurales y territorios más alejados donde no ha ingresado el Estado con servicios imprescindibles como agua potable, desagüe, electricidad, carreteras, entre otros, por lo que existe una deuda histórica importante.
En ese sentido, dijo que para hacer cambios y que el Estado mire al mundo rural campesino, y pueda recoger las necesidades desde los territorios de la selva y sierra es necesario contar con un Ministerio de Infraestructura que desarrolle los proyectos que necesita el país como las represas altoandinas que permiten desarrollo y dinamización de las economías rurales en las comunidades campesinas.
Además, dijo, se necesita tener un Ministerio de Desarrollo Rural, que sea multisectorial y multidimensional. “El Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri) tal como está actualmente es obsoleto, hay burocracia, se sobrepone mucha gente. No es posible que más del 70% del presupuesto del Minagri se vaya en gastos corrientes, cualquier empresa con ese gasto quiebra”.
“Tenemos que converger en un punto, pensar en generar esos cambios importantes que generen igual derecho, que permitan desarrollo, inclusión, que las brechas sociales terminen”, añadió el presidente de Conveagro.
El reto es lograr la competitividad
Por su parte, el director ejecutivo de la Asociación de Gremios Productores Agrarios del Perú (AGAP), Gabriel Amaro Alzamora, destacó que el sector agro es estratégico para los países por lo cual debe tener una posición principal en la agenda pública. Dijo que para lograr el desarrollo del sector existen agendas definidas que deben ser llevadas de manera urgente y eficiente por parte de las autoridades políticas.
“El productor agrario no produce por producir sino para llegar a un mercado y para eso utiliza la cadena productiva y de comercialización. En ese mercado el productor debe ser competitivo si no sale del mercado y quiebra, por ello se debe aprovechar al máximo las potencialidades que existen”, sostuvo.
Destacó que algunas de las ventajas competitivas que tiene la agricultura peruana son que todas las regiones son productivas, se ubica entre los 10 países con más agua dulce, tiene más de 350 tipos de frutas que puede explotar, existen más de 4 millones de hectáreas cultivadas, cuenta con 84 zonas de vida de las 114 que existen, y tiene 28 de los 32 climas que existen en el mundo. Además, actualmente ocupa el décimo tercer lugar entre los principales países proveedores de frutas y hortalizas del mundo.
Agregó que otra fortaleza son los 2.2 millones de productores agrarios que hay en el país y 4 millones de personas que trabajan en toda la cadena de la agricultura, por lo que es responsabilidad del Estado ayudar a esa cadena para que se mantenga competitiva, desarrollando programas para promover la asociatividad, la capacitación y asistencia técnica, financiamiento oportuno y adecuado, todo eso le permitirá al pequeño productor crecer e integrarse a las cadenas productivas y al mercado local o internacional.
“La clave es tener alta productividad y factores de competitividad y en Perú los tenemos, lo que pasa es que tenemos serios problemas, las regulaciones (burocracia) se sobreponen a la competitividad y muchas veces arrastra a la competitividad”, comentó.
El representante de AGAP dijo que todos los días hay peligros por nuevas regulaciones (por parte del Ejecutivo o Legislativo) que aparentemente mejoran una situación, pero lo único que hacen es agregar sobrecostos que pueden quebrar cadenas productivas enteras.
“El tema regulatorio es vital y no se hacen los estudios de costo -beneficio para que la cadena de producción-abastecimiento-comercialización de alimentos se mantenga competitiva en el mercado y se le agrega esa grasa burocrática o regulatoria que no ayuda. El pequeño agricultor no puede asumir toda esa regulación, el Gobierno tiene que limpiar esa regularización innecesaria e improductiva para hacernos eficientes y poder competir de igual a igual con cualquier país del mundo”, manifestó.
Mayor acceso a tecnología
El decano de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional San Cristóbal de Huamanga (UNSCH), Rolando Bautista Gómez, destacó por su parte que nuestro país cuenta con productos saludables y únicos que podrían tener oportunidad en el mercado internacional como las papas nativas, tarwi, entre otros. Además, dijo que es importante mirar alternativas de producción en la sierra como la forestería.
Rolando Bautista también señaló que para desarrollar el sector es importante invertir en proyectos de siembra y cosecha de agua, tratamiento de aguas residuales que permitan incrementar la disponibilidad del recurso hídrico para riego; así como en carreteras para que los productos agrícolas lleguen a los mercados.
Invocó al Estado a trabajar en la producción de semillas de calidad para incrementar su uso, para lo cual pidió repotenciar la Comisión Nacional de Semillas y la Comisión Regional de Semillas, que está liderada por el Minagri; además pidió a las direcciones regionales agrarias que cumplan su función de promoción y transferencia de tecnología.
Mientras que el decano de la Facultad de Agronomía de la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM), Andrés Casas Díaz, resaltó la complejidad del agro peruano, ya que cada región tiene su propia peculiaridad. En ese sentido, dijo que para el desarrollo del sector rural es importante el adecuado uso del agua y llevar tecnología (previamente validada) a los pequeños productores, principalmente de la sierra y selva de nuestro país.