(Agraria.pe) A través del método de inseminación artificial transcervical con semen fresco, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) logró el nacimiento de sus primeras 25 cabras de raza pura Alpino Francés, con alta calidad genética. Estas crías contribuirán a fortalecer la competitividad de la actividad caprina en el país.
Estos nacimientos son el resultado de un exhaustivo trabajo de investigación y mejoramiento genético dentro del proyecto caprino PROCAP, desarrollado por el Instituto Nacional de Innovaci´ón Agraria (INIA) en la Estación Experimental Agraria Donoso de Huaral. Se empleó material genético de alto valor proveniente de machos cabríos de las razas Alpino Francés, nacidos en 2023 a través de transferencia de embriones, y cruzados con cabras de la misma raza del libro abierto.
Debido a su pureza y alto valor genético, estas cabritas nacidas en Huaral tienen un excelente potencial para la producción de carne de calidad, ideal para la gastronomía, y de leche rica en sólidos y nutrientes, adecuada para la elaboración de productos lácteos de alto valor.
Estos ejemplares de alta calidad genética pasarán a formar parte del núcleo genético caprino que el INIA gestiona en Huaral con el fin de generar investigaciones y estudios que permitan desarrollar tecnologías y material genético que fortalezcan la competitividad de la ganadería caprina y la rentabilidad de los productores en el Perú.
La raza Alpino Francés es reconocida por su alto rendimiento lechero y su versatilidad, tanto en sistemas de crianza intensiva (ordeño mecánico) como en el pastoreo. Además, se adapta muy bien a climas agrestes, como los de montaña. Las hembras de esta raza alcanzan una alzada de entre 75 a 85 cm, con un peso promedio de 60 a 80 kg, mientras que los machos pesan entre 80 y 90 kg.
Esta raza tiene una lactancia de 300 días, con una producción promedio de 2.5 litros de leche por día, aportando un 3.7% de grasa y 3.36% de proteína, lo que la hace ideal para la producción de derivados lácteos competitivos y de alta calidad, como quesos, yogures, mantequilla, y dulces.
Actualmente, en el Perú hay aproximadamente 90 mil productores dedicados a la ganadería caprina en zonas de bosque seco. Sin embargo, la tala ilegal para la obtención de leña, carbón y madera, el cambio de uso de suelo para la agricultura, el sobrepastoreo y la creciente contaminación de los suelos están poniendo en riesgo la sostenibilidad y rentabilidad de esta actividad.
Por esta razón, el INIA impulsa el proyecto PROCAP con el objetivo de desarrollar tecnologías que aumenten la productividad caprina mediante el mejoramiento genético, tanto en la producción de carne como de leche. Asimismo, se transfieren metodologías innovadoras para que los ganaderos optimicen la sanidad, nutrición y manejo de los animales, fortaleciendo así la sostenibilidad de la actividad caprina.