Especialista estadounidense considera que el recambio de cultivos puede ser beneficioso para la sanidad de los frutos. Augura además que La Niña no tendrá efectos negativos para la agricultura y que más bien “un poco de frío” le hará bien a las uvas.
(Agraria.pe) Galardonado en América y Europa por su trabajo en el cuidado de los cultivos de uvas –con reconocimientos como el Lifetime Achievement Award de la Sociedad Fitopatológica de América, División Pacífico-, el doctor Douglas Gubler, responsable del Laboratorio de Fitopatología de la Universidad de California-UCV Davis, llegó al Perú la semana pasada para compartir sus puntos de vista con los productores de uva del norte del país. Sus impresiones sobre la industria son muy positivas, aunque advierte de los riesgos y peligros del sector. Sobre ese y otros temas, conversó con Agraria.pe.
¿El cambio de zona de cultivo de las uvas, del sur hacia el norte del país, en ciudades como Piura, qué efectos puede tener en cuanto a la vulnerabilidad de la fruta a pestes o enfermedades en vista de la temperatura más alta?
Primero quiero decir que estoy impresionado por el desarrollo de la industria en el norte del Perú. Luego, que no importa dónde se desarrolle la uva, las enfermedades aparecerán allí donde se le plante. La más importante es el oídio, de la que hablé mucho con la gente de Piura, que es el principal problema para ellos actualmente. La otra gran enfermedad es la de los hongos de la madera, de la que me sorprendió ver tantos casos en el norte. Esto puede deberse al clima, pues los hongos necesitan agua para liberar sus esporas y causar infecciones, quizá las lluvias influyeron. Le atribuyo a las condiciones del clima el desarrollo de ambas enfermedades.
Los productores también están dejando de lado el cultivo de la variedad Red Globe, que ha saturado el mercado, por las seedless. ¿Es esta variedad más propensa a alguna plaga a diferencia de la Red Globe?
En realidad, si pudiéramos deshacernos de la variedad Red Globe tendríamos menos enfermedades en los viñedos. La Red Globe crece tan grande y tan rápido que produce grietas en el fruto por las cuales el hongo llega a la pulpa fácilmente, eso ocasiona problemas de pudrición ácida. Esto disminuiría con la reconversión de Red Globe por variedades sin semilla.
En cuanto a los fenómenos climatológicos, ¿qué podemos esperar como impacto del próximo Fenómeno de La Niña?
Para las uvas un poco de frío es algo bueno, especialmente si durante el periodo de dormancia pueden tener frío para que las hojas caigan de manera natural. Un poco de frío en el cambio de clima no creo que afecte a los cultivos de forma drástica.
Usted desarrolló en los años noventa una modelo de riesgo de oídio para los cultivos de uva, ¿en qué consistió este trabajo?
Es un modelo que lanzamos en 1996. Actualmente se usa alrededor del mundo. Lo basamos en un estudio de epidemiología del patógeno. Buscábamos que el agricultor pudiera monitorear el desarrollo del patógeno y se ha usado sin falla alguna hasta hoy. En América latina el modelo se ha usado en Chile, Perú, Argentina, México. Lo que se hace específicamente es desarrollar un índice de seguimiento de fluctuaciones entre cero y 100. Si el índice está por debajo de 30, los agricultores saben que el patógeno no puede multiplicarse ni causar infecciones. Si está entre 40 a 50 en cambio, podrá saber que el patógeno se desarrolla cada 15 días. Un índice de 60 indica que se reproduce cada 5 días. Esto significa que si el productor tiene esta semana en su viñedo un millón de esporas, a la semana siguiente tendrá 12 billones. El modelo les permite saber qué productos usar. Con un índice bajo pueden usar productos biológicos o de contacto, pero con uno superior a 60 deben aplicar productos sistémicos curativos.
Siendo usted un hombre de ciencia, ¿qué posición tiene sobre el uso de los transgénicos que son tan resistidos en el Perú?
Personalmente creo que los transgénicos son el camino correcto. Si logramos que la gente acepte el traslado de genes de una planta a otra, las hambrunas en el mundo terminarían. Hay genes que son reconocidos por incrementar la calidad de los productos, la resistencia a los insectos, genes que permiten disminuir el uso de agua en los cultivos, el menor uso de pesticidas. Si logramos que el mundo acepte esta tecnología tendremos comida de calidad y más barata.
Dato
.El doctor Douglas Gubler llegó a Perú por invitación de Bayer para visitar a varios de sus clientes en el país y participar de un foro organizado por Red Agrícola en la ciudad de Piura.