(Agraria.pe) Las Iniciativas de Vinculación para Acelerar la Innovación (IVAI) es un proyecto de mejora de la competitividad de cadenas de valor seleccionadas con criterios de prioridad, potencialidad, territorialidad y de posibilidad de impactar rápidamente con una determinada metodología, la cual es validada por el Banco Mundial. Estas iniciativas han sido empleadas desde hace más de 30 años en 70 países del mundo; en la región se desarrolló en Chile, Argentina, Brasil, Colombia y México.
El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Concytec) viene trabajando en la implementación de las IVAI en nuestro país, a partir de potenciar productos y servicios desde la riquísima diversidad biológica, geográfica, climática y cultural que tiene Perú.
Agraria.pe conversó con el director del Proyecto IVAI, Jordi Conejos, quien señaló que esta metodología también permite contrastar con las tendencias más relevantes y más representativas de estas cadenas de valor -en este caso de Perú- con tendencias internacionales.
Destacó que se ha trabajado con todos los agentes que tienen que ver en el desarrollo económico de estas cadenas de valor en los territorios seleccionados, tanto a nivel público, privado y academia, donde se identificaron estrategias y acciones concretas para mejorar procesos, y desarrollar nuevas habilidades que les permitan ser más competitivos, y poner al país a la vanguardia de un mundo que tiende hacia un comercio responsable y sostenible.
“Es una manera de trabajar para empoderar a los agentes, identificar con ellos las brechas, y establecer un acuerdo con lo que denominamos las líneas de acción, para poner objetivos a cumplir y, en base a ello, realizar un cronograma de seguimientos”, sostuvo.
Detalló que en nuestro país se trabajó en 8 IVAI, priorizando la gran biodiversidad de Perú, así como la riqueza de su territorio, lo que demuestra las muchas aplicaciones que se pueden utilizar en Perú justamente por su gran variedad tanto a nivel regional como a nivel de cadena de valor. Agregó que se tratan de cadenas de valor muy distintas de sectores como agro, minería, turismo, entre otros. Estas 8 IVAIS son:
Granos andinos en la región Ayacucho: Esta industria está focalizada en la producción de quinua, tarhui, cañihua y kiwicha, alimentos que tienen un rol central en la economía de la región. El proceso de cambio está dirigido a potenciar estos granos andinos como productos de especialidad, con principios de agricultura regenerativa y resiliencia climática, medición y mitigación de huellas ambientales; esto sumado a una detallada información nutricional. Ello demandará también un posicionamiento en el sector gastronómico y su distribución en tiendas especializadas.
Súper frutas tropicales y subtropicales en la región de Madre de Dios: El proceso de cambio está enfocado en el sector de la castaña amazónica, donde las líneas de acción están orientadas a un desarrollo productivo que permita fortalecer la calidad de la castaña, proyectándola hacia un segmento premium. Es decir, no solo se busca ofrecer al mercado un producto sostenible, que garantice una baja huella hídrica y de carbono y que contribuya al desarrollo de comunidades con un comercio justo; sino que además impulse una conciencia de respeto por el bosque.
Textil y confecciones en la región Arequipa: Esta industria podría desaparecer si no es capaz de adaptarse a las nuevas tendencias globales que exigen una moda ética, ambiental y socialmente sostenible. El cambio está dirigido entonces a impulsar el desarrollo integral en toda la cadena de valor de la fibra de alpaca, para lograr una oferta de productos ecoamigables, con una trazabilidad que permita demostrar al consumidor aspectos como el cuidado del animal, el uso de técnicas de ganadería regenerativa, una baja huella de carbono o el involucramiento de las comunidades en los procesos productivos y creativos, entre otros.
Productos de madera en la región de Ucayali: Para competir en el negocio de la madera es necesario mirar más allá de solo precio y volumen. El reto de esta cadena de valor está en especializarse en un mercado con segmento de nicho, para ofrecer especies de madera únicas en el mundo, y que además cuenten con sello de responsabilidad social y ambiental, asegurando la legalidad, la disponibilidad y la variedad. Sumando a las diversas funcionalidades estéticas e innovadoras para su uso.
Acuicultura sostenible en la región de Tumbes: La meta es que la industria avance hacia ser mayoritariamente intensiva, explotando al máximo el cultivo, pero con una gestión óptima de los recursos y el uso de insumos especializados. Se requiere entonces avanzar hacia una cadena de valor de langostinos sostenible, que sea transparente, que mida sus impactos, que implemente prácticas de circularidad y que logre conquistar a consumidores responsables, dispuestos a pagar un precio mayor por esas características.
Destilados premium en Lima Provincias: En este sector, el objetivo es formar un ecosistema que combine tradición con innovación, y posicionar al Perú como productor de destilados premium; no solo con la oferta del pisco, sino también con productos como el vodka y el whisky que se presentan como bebidas de especialidad, elaboradas a partir de papas nativas y maíz morado, respectivamente; y que destacan además por su alta calidad, ya reconocida con premios internacionales de gran renombre. El objetivo es lograr una adecuada convivencia entre innovación y los procedimientos tradicionales, para generar una diferenciación y un mayor valor a nuestros productos.
Proveedores de la minería en la región de Cajamarca: El reto para esta industria no solo está en la incorporación de herramientas tecnológicas basadas en ciencia y tecnología de última generación, que permitan procesos productivos con bajo o nulo impacto ambiental, y con una lógica de la economía circular; sino también en establecer un sistema que propicie la confianza entre los actores de la cadena de valor y en el desarrollo de capacidades de la región.
Turismo natural, cultural y de aventura en el corredor Lambayeque-La Libertad: En este sector se pretende aprovechar el potencial turístico actual, que principalmente viaja bajo la modalidad de “visita por paseo”, para transformarlo en un turismo con enfoque de aventura, vivencial y experimental. Para ello serán necesarias campañas de promoción y programas orientados hacia la innovación en productos, servicios e infraestructura en la Ruta Moche.
Jordi Conejos dijo que se está trabajando en una segunda parte del programa. “Si todo va bien con los plazos se podrá iniciar a principios del 2023, pero aún no están definidas las nuevas cadenas de valor ni las zonas territoriales a trabajar. Estamos en un momento de cierre del Proyecto I”, manifestó.
Datos
. Esta es una iniciativa impulsada por el Concytec y liderada por diversas instituciones públicas, como el Ministerio de la Producción, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo, el Ministerio de Economía y Finanzas, ProInnóvate, PromPerú y el Instituto Tecnológico de la Producción, con el apoyo del Banco Mundial.
. Jordi Conejos (España) es Senior Policy Advisor, socio y director de proyecto en Perú de The Cluster Competitiveness Group, INC., desde donde asesora a gobiernos regionales y nacionales en políticas de competitividad industrial basadas en clusters. Ha sido asesor de los gobiernos en Europa, África y América Latina en las implicaciones de las iniciativas de clusters. Hoy lidera la estrategia de IVAI (Iniciativas de Vinculación para Acelerar la Innovación) que ha iniciado en Perú.