(Agraria.pe) En 2022, la producción nacional de tarwi alcanzó las 18.383 toneladas, mostrando un aumento de +3.75% frente a las 15.790 toneladas registradas el año previo.
Así lo informó el titular de la Dirección General de Desarrollo Agrícola y Agroecología (DGDAA) del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), Mirbel Alberto Epiquién Rivera, quien destacó que la producción de tarwi se ha ido incrementando en los últimos años, lo que significa que es un producto cada vez más reconocido.
Detalló que del total de la producción, el 93% se destina al mercado nacional y el 7% restante a la exportación, es decir que este producto satisface principalmente la demanda interna, aunque la exportación brinda importantes oportunidades a los productores.
En ese sentido, dijo que para apoyar la exportación de este producto es necesario darle valor agregado y generar las condiciones sanitarias para despachar al mercado internacional.
Epiquién Rivera señaló que el tarwi se destaca porque tiene una serie de condiciones muy particulares en términos nutricionales y culturales. Además, tiene potencial para que en los próximos años destaque como un cultivo alternativo.
“Este cultivo es un recuperador de suelos, tiene capacidad para controlar plagas y por lo tanto es un producto que en los próximos años va dar mucho que hablar, principalmente en la gastronomía, por lo que será un boom económico y cultural y se convertirá en uno de nuestros productos embajadores naturales que tenemos en el mundo”, manifestó.
Asimismo, reconoció el esfuerzo de los pequeños agricultores de la zona andina que son los que conservan nuestros productos, y que a través de los siglos han ido creando las condiciones para que sigan existiendo hasta nuestros días.
Al respecto, indicó que son 30 mil familias productoras que se dedican al cultivo de tarwi en nuestro país, cultivo que genera 850.000 jornales directos al año. El 82%de las tierras dedicadas al tarwi son de agricultura familiar (de 1 a 3 hectáreas). Además, el 60% de los pequeños agricultores destinan su producción al mercado interno.
Las principales regiones productoras de tarwi en nuestro país en 2022 fueron: La Libertad que participó con el 34% del total de la producción, Cusco 19%, Huánuco 10%, Puno 9%, Apurímac 9%, Áncash 5%, Cajamarca 5%, Junín 5%, Huancavelica 3%, y Ayacucho 1%.
En cuanto a la superficie sembrada, dijo que en 2022 este cultivo se instaló en 11 mil hectáreas (igual área que en 2021). Agregó de la superficie total, el 89% fue cultivado en secano y el 11% con riego.
Sobre la exportación de tarwi procedente de Perú, dijo que en 202 alcanzó las 1.130 toneladas, mostrando un incremento +30% en comparación a las 869 toneladas despachadas en 2021.
Mientras que en valor, los despachos de este producto en 2022 ascendieron a US$ 874.000, registrando un alza de +38.73% versus los US$ 630.000 obtenidos por el mismo concepto el año previo.
Dato
. El titular de la DGDAA resaltó que Perú es centro de origen del tarwi. Existen alrededor de 3.000 accesiones de este producto que se conservan en 6 bancos de germoplasma en nuestro país: La Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM); Estación Experimental Agraria Baños del Inca (Cajamarca) del Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA); Universidad Nacional del Altiplano Puno (UNAP); Universidad Nacional de San Antonio Abad del Cusco; Universidad Nacional San Antonio de Huamanga de Ayacucho.