21 julio 2025 | 10:16 am Por: José Carlos León Carrasco | jcleon@agraria.pe

Señaló el embajador de la Delegación de la Unión Europea en Perú, Jonathan Hatwell

“El cacao peruano es una joya de la biodiversidad”

“El cacao peruano es una joya de la biodiversidad”
El cacao representa una fuente de orgullo nacional, de desarrollo local y de construcción de paz. Gracias al esfuerzo de las familias productoras el cacao peruano no solo conquista mercados internacionales, sino que también cuenta con certificaciones de comercio justo, trazabilidad ambiental y sostenibilidad social, comentó Hatwell.

(Agraria.pe) El cacao es uno de los productos más emblemáticos del Perú, más allá de su importancia económica, el cacao peruano es una joya de la biodiversidad y un motor de desarrollo sostenible para miles de familias.

Así lo destacó el embajador de la Delegación de la Unión Europea en Perú, Jonathan Hatwell, quien indicó que con el 60% de las variedades de cacao del mundo y el 36% de la producción global de cacao fino de aroma, el Perú se ha consolidado como referente internacional de calidad, sostenibilidad y comercio justo.

Agregó que Perú también es uno de los principales exportadores de cacao orgánico hacia la Unión Europea y ocupa el segundo lugar en el mundo como productor de cacao fino de aroma.

“El cacao representa una fuente de orgullo nacional, de desarrollo local y de construcción de paz. Gracias al esfuerzo de las familias productoras el cacao peruano no solo conquista mercados internacionales, sino que también cuenta con certificaciones de comercio justo, trazabilidad ambiental y sostenibilidad social”, comentó.

Añadió que este avance representa una oportunidad no solo para el desarrollo nacional y el comercio, sino que se alinea totalmente con la visión más amplia de transformación económica sostenible impulsada por la Unión Europea a través del Pacto Verde, cuya visión y aplicación no se limitan al continente europeo.

Señaló que a través de diversas iniciativas de cooperación, la Unión Europea está trabajando activamente con países socios como el Perú para impulsar cadenas productivas más sostenibles, inclusivas y resilientes.

En ese camino, dijo que el cacao peruano representa un ejemplo concreto de como una cadena de valor puede integrar principios de economía circular, agregando valor a los territorios, generando nuevas oportunidades económicas y abriendo puertas a mercados como el de la Unión Europea que valoran la sostenibilidad, la equidad y la calidad.

Indicó que a través del programa  de Economía Circular y Negocios Sostenibles de la Unión Europea, vienen trabajando en regiones como San Martín y Piura para fortalecer la cadena del cacao, junto a cooperativas, gobiernos regionales y socios técnicos, con iniciativas que promueven el reaprovechamiento de sus productos y generan nuevas oportunidades económica basadas en la innovación circular.

Destacó que esta apuesta por modelos productivos más eficientes y sostenibles no solo contribuye al desarrollo local, sino que también mejora el acceso a mercados que valoran prácticas responsables y ambientalmente conscientes.

“Gracias al liderazgo de esas asociaciones y cooperativas se está cerrando el ciclo productivo. Por ejemplo se reutilizan cáscara de cacao para elaborar fertilizantes orgánico, se transforma residuos en bioinsumos, se optimiza el uso del agua y la energía; estas iniciativas generan nuevos ingresos, reducen impactos ambientales y aumenta la competitividad de los productos peruanos frente a los estándares internacionales más exigentes”, manifestó.

Jonathan Hatwell dijo que la Unión Europea mantiene una cooperación estrecha con el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri)  y la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida) para apoyar al país y avanzar juntos en cumplir dichos requisitos. Al respecto, destacó que el Perú y su sector cacaotero están logrando adecuarse a la nueva normativa sobre los productos libres de deforestación.

“El cacao peruano no solo es un producto de excelencia, es también un símbolo de lo que es posible cuando el Estado, las comunidades, el sector privado y la cooperación internacional trabajan juntos. Reafirmamos nuestro compromiso de seguir caminando a su lado impulsando juntos un modelo de desarrollo que reemplace la ilegalidad por inclusión, que sustituya la deforestación por innovación y que ponga en el centro a las personas, a la tierra y el futuro común que compartimos”, finalizó el embajador de la Delegación de la Unión Europea en nuestro país.

 

Etiquetas: cacao , biodiversidad