(Agraria.pe) El presidente de la Asociación de Productores y Exportadores de Palta Hass del Perú (PorHass), Juan Carlos Paredes, señaló el mes pasado, que la campaña de la palta peruana -que inició en enero-, venía siendo beneficiada por buenos precios, 40 a 50% mayores a los del año pasado, pero que los volúmenes eran adversos.
“Este año deberíamos estar hablando de 468.000 toneladas, lo que significaría una caída de -16% respecto al año pasado, aunque podría ser más grande”, advirtió, mencionando condiciones climáticas no favorables para el cultivo.
Hoy, un mes y medio después, Horacio Berríos, reconocido consultor y asesor agronómico con amplia experiencia en la industria nacional e internacional de paltos y cítricos, nos puso al día respecto a la situación de los campos de palto en Perú, así como a los desafíos comerciales que debe enfrentar el sector en el país.
“La presente temporada viene siendo muy compleja y difícil, debido, en efecto, a las condiciones ambientales extremas a las que se vieron sometidos los campos en todo momento y que provocaron que los árboles soporten condiciones de estrés pocas veces vistas en los últimos años. No sólo se debe considerar las altas temperaturas, sino también la radiación extremadamente alta, índices UV extremos, baja humedad relativa, y la presencia de fuertes vientos”, dijo Berríos.
Pero, ¿qué es lo que tiene que hacer hoy un productor de palta en Perú para tener éxito esta temporada? ¿Qué es lo que tiene que hacer un jefe comercial para que su empresa tenga éxito? “Esta temporada ya está jugada”, respondió, tajante. “Queda, en algunos casos, apoyar el crecimiento de la fruta de la última generación floral para mejorar el calibre, asegurar la cosecha con un contenido de materia seca óptimo -ojalá, en mi opinión, no menor a 23% ni mayor a 27%-, y cuidar que la operación de cosecha y empaque sea lo más pulcra posible en términos operativos y técnicos, de modo que la fruta pueda preservar sus atributos de calidad”.
Para el ingeniero agrónomo y gerente de Persea Agrícola, la disminución de los niveles productivos de los campos no debe ir de la mano de una disminución lineal o proporcional de la inversión en los cuidados que la planta necesita.
“Me gustaría dejar un mensaje claro y directo a los productores: somos productores de paltas, no de clavos o tornillos; escucho horrorizado que hay campos en los que los ajustes presupuestales son lineales a la baja producción, y -si bien esto es un negocio- debemos entender que al trabajar con seres vivos, extremadamente complejos como lo son los paltos, todo lo que dejemos de hacer ahora se reflejará en la siguiente temporada. Sería un muy mal escenario entrar a una temporada 2024/2025 con árboles débiles, nutrimentalmente desequilibrados, con escaso desarrollo radicular o con bajo vigor en general”.
Ensuciarse los zapatos
Respecto al trabajo de los jefes o gerentes comerciales, Berríos comentó que en los veintidós años que tiene de experiencia como asesor y consultor, ha podido constatar que cuando la relación con el área técnica/productiva de la empresa es fluida, la efectividad aumenta considerablemente. “Los jefes comerciales tienen que ir al campo durante todo el ciclo de desarrollo de la temporada; es la única forma en que serán capaces de conocer a profundidad la fruta que pretenden vender”, sostuvo.
En enero último, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego de Perú (Midragri) comunicó que el Departamento de Agricultura de Malasia había formalizado los requisitos fitosanitarios para el ingreso de palta Hass peruana a este relevante mercado asiático. Cabe mencionar que el 93% de la palta que se exporta desde el Perú es Hass, la que más se exporta en el mundo. El caso es que, con la posibilidad habilitada para exportar a Malasia, hoy la palta peruana puede ingresar a 67 mercados del mundo y ha ubicado al país como el segundo exportador de esta fruta en el mundo.
Horacio Berríos señaló que esta temporada viene siendo “compleja y difícil”. ¿Perú mantendrá su puesto de segundo mayor exportador mundial de palta? Respondió: “Estimo que, pese a las complicaciones a nivel productivo en la presente temporada, mantendremos aún esa posición en la industria global del palto. Sin embargo, pienso que nos toca recorrer un camino de transición en el que nuestra industria se reacomode hasta estabilizar, en los siguientes cinco años, un área productiva a nivel nacional más acorde a la demanda global”.