(Agraria.pe) China es el principal socio comercial del Perú a nivel global, sin embargo, en lo que a agroexportación se refiere, aún queda un largo camino para que llegue a convertirse en un destino relevante, como Estados Unidos, España o Reino Unido. En 2024, las ventas agrícolas a China no solo no aumentaron como ocurrió con los grandes compradores de productos peruanos, sino que retrocedieron de manera significativa: -27%, siendo uno de los destinos que tuvo mayor contracción.
Las ventas de productos agrícolas peruanos a China sumaron US $ 267 millones, cifra que lo sacó del Top 10 de principales destinos. Un año antes había alcanzado el puesto 6 y es preciso indicar que China adquiere apenas el 2% de las agroexportaciones peruanas, mientras que Estados Unidos absorbe el 36% y Europa el 35%. Pero, ¿ahora que se cuenta con un puerto dedicado a atender una ruta comercial directa con China, el peso de este país mejorará?
Antes de responder a esa pregunta, habría que analizar qué generó que China redujera su peso en el 2024. Esta situación se explicó por dos razones que se alimentaron entre sí. La primera, los principales productos peruanos enfrentaron buenos precios y demandas estables -o incluso crecientes- en sus principales destinos, por lo que atenderlos era económicamente muy atractivo. Y la segunda razón fue que las barreras no arancelarias (regulación y requisitos sanitarios) existentes en China suelen desalentar los envíos a este destino. Este país impone exigentes condiciones de temperatura, certificaciones específicas obligatorias y límites estrictos de residuos agroquímicos, así como etiquetado y formatos autorizados muy rigurosos e incluso calendarios de envío acotados. Un conjunto de exigencias que incrementan la estructura de costos de las empresas con respecto a otros destinos y, salvo que esté compensado con buenos precios, desalilenta a los exportadores.
Es por ello que, en el 2024, ante un contexto de mercados flexibles, conocidos y con buenos precios, versus un mercado estricto, poco conocido y con precios no muy atractivos, la decisión adoptada parece evidente.
El arándano, por ejemplo, que fue el principal producto exportado por el Perú a China, con más de 14 967 toneladas por un valor aproximado de US$ 107 millones, tuvo una caída de alrededor del 10% en volumen y del 18% en valor en el 2024, siendo uno de los pocos mercados en los que el precio se redujo de manera significativa, -9%.
La producción local fue alta (780,000 toneladas, 3 veces la producción total peruana) y Chile con un producto más barato tuvo buena aceptación (+23% de crecimiento en volumen), por lo que le quedó poco espacio al arándano peruano, que además, para entrar, se le demanda tratamientos de temperatura muy específicos, situación que en el mercado estadounidense se maneja en rangos mucho mas amplios y en Europa no es una exigencia.
Al analizar el comportamiento de las empresas, a nivel global los principales exportadores peruanos fueron Camposol S.A. (25% del total), Agrovision Perú S.A.C. (18%) y Hass Perú S.A. (14%), mientras que al analizar el destino China, los principales proveedores peruanos fueron Hass Perú (concentra 20% de sus envíos totales), Agrovisión (7%) y Camposol (7 %). Es decir, el nivel de atomización hacia China es alto, siendo atendida por pequeños agroexportadores.
En el caso de la palta, que fue el segundo producto más importante de la canasta agroexportadora peruana a China, la caída en volumen fue de 33 % y la caída en valor fue de 19 %. Pero en este caso, los números negativos no se originaron por mayor competencia. Chile es el principal competidor del Perú en palta en China, pero cada vez cuenta con menos volumen para exportar, mientras que la producción interna de China no fue capaz de abastecer la demanda y esto abrió una ventana para el Perú. Pero la necesidad de certificaciones de áreas libres de polilla del fruto del palto demora hasta dos veces más que las de otras regiones, así que en lugar de entrar más producto peruano, la escasez se traslado a precio, que se incrementó en 21%.
El principal exportador peruano de palta al mundo en 2024 fue Westfalia Perú, con cerca del 16% de participación, seguido de Camposol S.A., con 10%; y Marand Company S.A.C., con 8 %. Pero en el análisis de las exportaciones a China, las posiciones se invierten, siendo Marand Company la líder con 24% de los envíos totales, frente al 11% de Camposol y al 10% de Westfalia.
Entre las barreras no arancelarias que enfrentan los exportadores agrícolas peruanos se puede incluir los menores límites de residuos de pesticidas que demanda China a la uva peruana, versus lo que solicita un mercado tan exigente como la Unión Europea. O el tratamiento de frío a los cítricos peruanos que es de 17 días completos para China, mientras que Estados Unidos tiene plazos más flexibles según punto de origen. Y no hay que olvidar el sistema de trazabilidad con QR que es específico de China, mientras que los otros destinos aceptan otros sistemas de trazabilidad.
China es un destino complejo. Ya de por sí es difícil encontrar ventanas para exportar, pues su producción interna es muy grande y genera mercados con precios no siempre atractivos, pero si se le suma las barreras no arancelarias, que se traducen en costos extra, se dificulta aún más competir. En ese escenario, sin embargo, surgió en el 2024 algo que aún no se ha terminado de medir: el puerto de Chancay y la ruta directa que abrió a China. Una logística más económica reduce esos costos extra que demanda cumplir los requisitos más exigentes del destino China, pero no queda tan claro si será suficiente para todos.
De acuerdo con los estimados de FreshFruit, este año China debe mejorar como destino, gracias a las buenas campañas cerradas en la primera mitad del año. Además, estaría próxima una solución a la guerra comercial con Estados Unidos, que dificulta su competitivada en dicho destino y que al no exportarse genera una mayor presión sobre los precios internos en China. Sin embargo, el crecimiento que puede mostrar en el 2025, estaría aún por debajo del resto de destinos.
Quedan importantes tareas por completar desde el Perú para facilitar el acceso a ese gran mercado en mejores condiciones. Son trabajos puntuales de las autoridades en mecanismos para agilizar las gestiones y protocolos que permitan a los exportadores peruanos atender de manera más oportuna a la demanda del gigante asiático. Es un reto que no puede dejarse de lado, pues es la única manera que tiene el Perú para continuar en la senda de consolidarse entre los líderes mundiales en la venta de frutas.
Fuente: Fresh Fruit