En la actualidad existe un especial interés en buscar una alimentación saludable o demandar un mayor número de alimentos funcionales, nutraceúticos, que aporten algo más que nutrientes, y ayuden a mejorar o prevenir diferentes enfermedades e incluso se habla de la nutricosmética o de alimentos para la belleza.
En este marco, según algunas publicaciones internacionales, diversas empresas a nivel global vienen tratando de desarrollar una oferta amplia de nuevos productos que atiendan a estas demandas. Se vienen mencionando diversos conceptos como alimentación saludable, innovación alimentaria, nutrientes críticos, compuestos bioactivos, antioxidantes, superalimentos, probióticos o prebióticos, que a veces no cuentan con una base científica o conocimiento para entrar a etapas más avanzadas de desarrollo.
Esta tendencia muestra que se podría estar dando un cambio importante en el mercado agroalimentario donde nutricionistas, ingenieros de alimentos, médicos, empresarios, productores y gobiernos, entre otros actores, van a tener un papel protagónico en el desarrollo y lanzamiento de productos saludables innovadores.
La innovación exitosa en nuevas formulaciones y productos con, por ejemplo, un reducido contenido en grasa, azúcares, sal o con nuevos ingredientes funcionales suponen un gran desafío, pero se necesita un trabajo en equipo y en donde las investigaciones científicas y avances en ingeniería de alimentos deben ser una gran herramienta para promoverlos, en la idea de ofrecer una alimentación saludable donde se descubra nuevos sabores, nuevas texturas y nuevas sensaciones degustativas.
Buena parte de estos productos pueden tener su base en el uso y valorización de la biodiversidad. En el caso del Perú, asociado a las ideas anteriores, su biodiversidad constituye una de sus mayores riquezas y es una potencial fuente para el desarrollo de una industria competitiva en las líneas descritas. La valoración de la biodiversidad debe considerar la incorporación de todos los niveles de organización en que ésta se subdivide, más allá de lo que la economía de recursos naturales y la economía ambiental toman en cuenta. Es decir, no solo se debe valorar los servicios ecológicos sino también la misma base de la biodiversidad, los genes, cuyas características pueden ser fuentes importantes para el desarrollo de diversos productos y negocios.
Concytec ha identificado que existe un limitado conocimiento científico de los componentes de la biodiversidad (ecosistemas, especies y genes) del país, asociado a un limitado conocimiento de las características biológicas, bioquímicas y moleculares de las especies de la biodiversidad. Articulado con esto se identifica un bajo nivel tecnológico en los procesos de producción y desarrollo de productos en base a la biodiversidad, que a su vez se relaciona con una débil prospectiva y vigilancia tecnológica de las cadenas de valor de la biodiversidad para identificar potenciales innovaciones.
En los últimos años se han venido desarrollando diversas experiencias con productos principalmente de la amazonia y muy poco en el caso de los relacionados con la sierra, en los cuáles se necesita llegar a mayores escalas de negocio. Se debería aprovechar las oportunidades que se presentan en el Perú, según Concytec: i) gran biodiversidad y múltiples ecosistemas existentes ofrecen enormes posibilidades de desarrollo tecnológico; ii) voluntad política (políticas públicas) para apoyar y promover la investigación y tecnologías en biodiversidad; iii) interés público y privado y de la cooperación en desarrollar productos y servicios en base a la biodiversidad; iv) incremento de fondos nacionales para financiamiento de proyectos de investigación e innovación.
Un tema clave consiste en que las empresas y los productores organizados se vinculen con el sector académico y utilizar los conocimientos y tecnologías para desarrollar innovaciones de proceso y producto para hacer competitivas las cadenas de valor asociadas a los recursos de la biodiversidad.
Un mayor nivel de investigación y desarrollo de innovaciones en esta línea, se puede convertir en un excelente medio para potenciar el uso de los recursos de la biodiversidad y afrontar los retos de la nutrición y salud, en base al desarrollo de negocios sostenibles. El encuentro entre las tendencias de los mercados globales y los productos obtenidos a partir de la investigación y desarrollo, son fundamentales para aprovechar las oportunidades en los diversos segmentos de mercado.