(Agraria.pe) Con una demanda de arándanos que aumenta durante todo el año y una oferta que aún tiene dificultades para dar abasto, la empresa de mejora vegetal Fall Creek ve una oportunidad de crecimiento como nunca antes. El momento estratégico de la cosecha en Sudáfrica, Zimbabue y Namibia podría ayudar a cerrar la brecha de suministro anual, mientras que las nuevas variedades de alto rendimiento prometen una vida útil más larga y una calidad constante.
Esto es lo que se debatió la semana pasada en Fall Creek, que celebró su Connect Event en su vivero de Paarl, antes de la Cumbre de la Organización Internacional del Arándano (IBO) de 2025 en Ciudad del Cabo. Allí recibió a productores, socios y líderes del sector de todo el mundo para debatir cómo el mercado mundial del arándano está a punto de experimentar un gran cambio, y el sur de África está preparado para desempeñar un papel protagonista.
Ameli Aust, expresidenta del Consejo de Administración de Fall Creek, compartió la trayectoria de la empresa desde sus primeros ensayos de cultivo en México hasta convertirse en un actor global con operaciones en los cinco continentes. Recordó el impacto de la crisis financiera de 2008. "Nuestros ingresos cayeron a niveles inferiores a los de dos años antes. Tuvimos que diversificar y, en un momento dado, llegamos a cultivar stevia y avellanas", explicó.
Aust describió la visión a largo plazo de Fall Creek: producir arándanos 52 semanas al año. "Nos diversificamos de frío alto a frío bajo y a frío cero, con Perú y México a la cabeza. Les siguieron Chile y Sudáfrica, y China fue la última de nuestra lista", explicó. "Sudáfrica se encuentra ahora mismo en un punto de inflexión. Hay un gran potencial, y el hecho de que la Cumbre de IBO se celebre aquí este año lo dice todo", añadió.
Fall Creek se acerca a su 50 aniversario, y la empresa está reforzando su equipo directivo y su gobernanza. "Seguimos siendo una empresa familiar, pero ahora la familia participa aún más en la estrategia", afirmó.
Innovación e inversión a escala local
Herman Louw, Country Manager de Fall Creek South Africa, presentó el vivero de Paarl como un centro de innovación y crecimiento. "Cultivamos arándanos en lugares donde nunca antes se habían cultivado, y eso no es tarea fácil", dijo. "Es un negocio duro, y queremos formar parte de ese proceso de aprendizaje y crecimiento con los productores".
Se mostró orgulloso del equipo local y del amplio apoyo de Fall Creek: "Estas instalaciones tienen capacidad para duplicar su tamaño. Invitamos a los productores a que se pongan en contacto con nosotros y vean el potencial de inversión y asociación".
Realidades del mercado: "La calidad debe ser constante"
Cindy van Rijswijk, de Rabobank (Países Bajos), compartió una visión detallada del mercado, señalando que, aunque la demanda de arándanos sigue creciendo, es fundamental mantener la calidad y la eficiencia. "Los arándanos están superando a otras frutas en la Unión Europea (UE)", señaló, haciendo referencia a los datos de precios y volúmenes. "Pero si los mercados se inundan de calidad irregular, los precios bajarán".
Explicó que, aunque el poder adquisitivo en Europa ha mejorado últimamente, los consumidores siguen siendo cautos. "La gente ahorra más y aún se asusta cuando compara los precios con los de hace dos o tres años", señaló.
También destacó que los arándanos ya no se consideran solo una fruta de temporada. "Vemos más patrones de compra durante todo el año. Esto abre nuevas ventanas, especialmente para los productores del sur de África".
Lecciones de Perú: crecimiento y desafíos climáticos
Julio Zavala Muñoz, gerente general de Fall Creek Perú, ofreció perspectivas sobre el rápido crecimiento de la industria peruana. "En 2017, Perú produjo 27.000 toneladas. Esperamos 400.000 toneladas en 2025", apuntó. "El Niño del año pasado redujo nuestro pico semanal de 21.000 toneladas a 11.000, pero estamos seguros de que este año volverá a ser normal. La imprevisibilidad del clima es un verdadero reto".
Asimismo, la industria peruana está evolucionando del suelo a los sustratos, invirtiendo en sistemas de fertirrigación y riego. "Ya no se trata solo de producción, sino de precisión", afirma.
Zavala Muñoz también habló de dificultades logísticas y políticas. "El año pasado, las uvas de mesa tuvieron prioridad sobre los arándanos en el envío durante unos días. Y aunque la política puede ser inestable, como empresa privada hemos encontrado formas de seguir creciendo".
Mejora vegetal para el futuro
Jesús Morales Huerta, gerente sénior de investigación aplicada de Fall Creek México, describe el riguroso proceso de obtención de la empresa. "Tardamos entre 8 y 15 años en desarrollar una variedad comercial", destacó. "Hacemos pruebas en más de 140 áreas de ensayo antes de liberar una variedad para asegurarnos de que funciona en diferentes regiones".
Los programas de mejora vegetal de Fall Creek abarcan ahora entornos de frío alto, bajo y cero para atender a diversas regiones y suministros. "No basta con que una baya tenga buen sabor, tiene que tener una vida útil constante, poder cosecharse con máquinas y ajustarse a la economía del productor".
Morales anunció dos nuevas variedades prometedoras: FCE21-017, una variedad de tamaño jumbo de principios de temporada con una vida útil de 45 días, y FCE21-024, una baya de mediados de temporada con una vida útil de 120 días. "FCE21-017 podría ser una buena opción para Sudáfrica, con un pico de producción hacia abril/mayo", subrayó. Los nombres de las variedades se darán a conocer en breve.
Sekoya y la planificación estratégica del suministro
Mark David, vicepresidente y director general de Sekoya, presenta la visión de la empresa sobre el suministro premium durante todo el año. "Nuestra misión es suministrar fruta de calidad 52 semanas al año, coordinados globalmente con los productores", declaró.
Según David, ya hay 80 millones de plantas Sekoya en el suelo, de las cuales el 45% están en Perú. Para el sur de África, las semanas 20 a 38 ofrecen la oportunidad de suministro más estratégica. "Esta región tiene una de las mayores oportunidades de crecimiento. También estamos impacientes por ver qué aporta Marruecos", expresó.
"El sur de África como futuro origen alternativo"
Paul Nselel, director comercial de Fall Creek, abundó en la inversión de la empresa en la región. "El sur de África tiene una larga historia agrícola y una mano de obra asequible. Si los productores gestionan bien los costes de los insumos, tienen una ventaja competitiva global única", afirmó, destacando que el calendario potencial de la cosecha en Zimbabue (abril), Namibia (mayo) y Sudáfrica (junio) se ajusta perfectamente a la demanda mundial.
Cort Brazelton, consejero delegado de Fall Creek y colaborador en el 17.º Informe sobre el Estado Global de la Industria del Arándano de la IBO, subrayó la magnitud de las oportunidades que tenemos por delante. "Si lo hacemos todo bien, la producción mundial de arándanos podría alcanzar los 2,4 millones de toneladas en 2030; es decir, 2.400 millones de kilos", detalló.
Sin embargo, señaló una importante brecha en la oferta a lo largo del año. "Si dividimos el calendario en tres ventanas de producción iguales, aún nos faltan 800.000 toneladas en cada uno de esos periodos", puntualizó. "El sur de África está en una posición única para ayudar a llenar ese vacío, especialmente durante la ventana de máxima demanda".
El éxito depende de la calidad. "La oportunidad es enorme, pero necesitamos fruta consistente y de primera calidad. Por eso Fall Creek empezó en Sudáfrica. Ya no se trata de competir con otros productores o programas de mejora: la oportunidad es así de grande".
Fuente: Fresh Plaza